Cuando buscaba reparar tu corazón, perdí el mío.
18
jul.
2018
Nos amabamos tanto, que ninguno de los dos supo luchar.
Esperando un acto, una llamada que nunca llegó, por cobardía u orgullo.
No hay duda, fue amor, un amor cobarde, el cual dependía del acto del otro.
Nos complementamos pero también nos destruimos.
Lo que debimos defender, dejamos que se marchitará como la rosa con espinas que algún día me regalaste.
En nuestras vida, un tiempo determinado, con fecha de vencimiento.
Un amor que se enterró en el fondo del alma, en un lugar oscuro y olvidado.
Sin volver al pensamiento.
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